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El coronavirus también ‘enfermará’ a negocios de pescados y mariscos en Semana Santa
La Cuaresma es la época del año más esperada para los comerciantes y restauranteros de pescados y mariscos en la Ciudad de México, sin embargo la contingencia sanitaria por la llegada del coronavirus les ha impactado en sus ventas, con un disminuciones que van desde el 50% hasta el 70%.
Sobre el Canal de la Viga, hoy convertido en Calzada, está uno de los puntos comerciales de pescados y mariscos más conocidos de la capital del país; al interior del mercado todavía sobreviven cuatro locales de este giro, los cuales ofrecen en canastas de color naranja diferentes variedades de productos marinos.
“Se supone que esta era la temporada buena”, comentó la encargada del lugar, quien refirió que la “semana santa” es la mejor época para la venta de estos productos; sin embargo sus ventas se han reducido un 50% en la última semana debido a la alerta de expansión del Covid-19.
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Mientras le quita las escamas a una mojarra, la mujer refirió que no se esperaban esta situación, además de que las autoridades no han entablado comunicación con ellos para saber qué va a pasar, por lo que seguirán trabajando hasta que les indiquen lo contrario.
Foto: Oswaldo Ramírez para Forbes México
Para la vendedora del local siguiente, las afluencia de clientes ha disminuido hasta un 80%, además de que algunos productos importados se ha encarecido, como el salmón que viene de Chile, ya que su precio se ha elevado un 20%, según le calculó.
De acuerdo con los locatarios de “la Vieja Viga”, la contingencia por el coronavirus ha dañado su cadena productiva: ante la ausencia de comensales, algunos restaurantes se han visto en la necesidad de cerrar, por lo que les dejan de comprar pescados y mariscos.
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Fondas económicas, restaurantes en la Condesa y Polanco, hasta las amas de casa, son clientes que han ido disminuyendo durante estas semanas, detallaron los comerciantes a Forbes México.
Cada año, el domingo previo a la semana mayor (jueves y viernes santo), se instala una romería sobre la Calzada La Viga, un tianguis extenso que es nutrido por comerciantes de La Merced, la Central de Abastos y diferentes puntos, puesto que es un lugar famoso para la venta de productos extraídos del mar. Sin embargo, los negocios aledaños desconocen si este año se realizará dicha venta.
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Cualquier transeúnte que se disponga a caminar sobre la banqueta de dicha avenida es abordado por un gran número de meseros, quienes convencen con carta en mano a nuevos cliente para las mesas vacías.
Foto: Oswaldo Ramírez para Forbes México
Desde un 50 hasta 70% de caída en los comensales es lo que le calculan los jóvenes que atienden los restaurantes La Langosta y El Marisquero, quienes esperan pacientes afuera del lugar a que lleguen nuevos clientes, con una gran pancarta que indica las medidas de sanidad que han tomado.
Las primeras víctimas del negocio del paladar fueron Vikingos II y Puerta del Sol, un par de restaurantes que cerraron en la última semana, de acuerdo con los locatarios vecinos. Sobre sus cristales sólo se dejan ver las mesas apiladas y las sillas, unas sobre otras.
Para el señor Juan, quien dirige un negocio de comida del otro lado de la avenida, la incertidumbre es total, por lo que aseguró que seguirá trabajando hasta que las autoridades digan lo contrario: “no queda más que seguirle echando ganas”.
Explicó que a veces no se sabe qué es mejor, si abrir o cerrar, porque cuando se levantan las cortinas, se invierte y no hay gente, esto se traduce en pérdidas que se tienen que absorber. Por ello, algunos negocios vecinos han decidido pausar sus actividades durante el tiempo de alarma sanitaria.
Cinco son los empleados que están a su cargo, abundó el comerciante, a quienes ya les ha planteado la situación que se está atravesando; sin embargo reiteró que continuarán laborando por el momento.
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Ante el difícil panorama económico que se avecina, el 10% de los pequeños negocios de la Ciudad de México podrían cerrar sus cortinas para siempre, según estimaciones de la Cámara de Comercio Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope).
Foto: Oswaldo Ramírez para Forbes México
Es decir, de los 430,000 negocios que tiene conocimiento dicho organismo, 43,000 de ellos no soportarían medidas más estrictas para evitar la propagación del coronavirus en la Ciudad de México.
Este martes, autoridades sanitarias federales informaron sobre el inicio de la fase 2 contra la pandemia de Covid-19 en el país, lo cual implica una suspensión temporal de actividades laborales públicas y privadas; cancelar reuniones de 100 personas o más; entre otras medidas.
En tanto, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció que durante esta semana daría a conocer el plan para la reactivación de la economía local durante y después de la contingencia. En tanto, este domingo indicó sobre el cierre de cines, teatros, bares, baños de vapor, salones de fiesta, así como todo lugar que reúna a más de 50 personas.
El coronavirus también ‘enfermará’ a negocios de pescados y mariscos en Semana Santa
Arturo Ordaz Díaz
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